En “ Jeux d´eau” lo sutil del azul se revela en su esplendor mínimo y máximo al mismo tiempo: su vibrante recelo a las diferentes fuentes de luz, la natural, la artificial, devela lo cambiante del ciclo del día, un juego donde el azul vibra con su propia naturaleza a la luz natural y se detiene y calma con luz artificial. Es tan sutil el juego de azules que “El sueño de la mujer de agua”, puede desaparecer en el día y percibirse perfectamente con luz artificial durante la noche.
Estos trabajos fueron realizados en condiciones de observación y estudio de vibración de color; durante el día en las primeras horas de la mañana y reestudiado durante la noche y la madrugada.
La estructuración de la forma del agua, permanente y cambiante, ha sido un cuasi infructuoso trabajo, de no ser por los marcos que contienen la obra. Se escapa una y otra vez entre los dedos, cambiando continuamente.
“La ola”, es el preludio que con la piedra esculpida por el agua nos da una lectura un poco más precisa del otro fluir: el constante y sostenido en el tiempo, fluir que marca lo aparentemente inmutable de la piedra.
Tintas, óleos, collages, pigmentos, arena de cuarzo pigmentada, óxido, chapas herrumbradas con agua salobre, limaduras de hierro oxidadas en medium acrílico, y principalmente el juego de la materia líquida, remiten al mismo concepto de cambio permanente, búsqueda, observación y por último conciencia.
El agua se gana a las ciudades en “Noche de agua”, donde pudre y oxida las estructuras de la rivera y de las zonas altas.
“Hierro agua” es el más pensado de todos los trabajos, el más mental y pretencioso, chapas oxidadas buscadas en un parque de esparcimiento, naturalmente herrumbradas por la humedad ambiente y la lluvia, son invertidas como olas de hierro sobre un fondo pigmentado azul que vibra profundamente a la luz solar.
En la segunda parte de este díptico una nave suspendida en un cielo de agua parece estar llegando y ambiguamente zarpando a la vez, con su irreductible posibilidad de naufragar.
“La muchacha ahogada”, sobre la poesía de Bertolt Brecht es apenas una interpretación de un texto traducido del alemán.
Paisajes urbanos desolados de presencias actuales juegan con sus fantasmas inconscientes del poder real del agua a la que han agitado durante siglos. Sus presencias son apenas visibles en “Agua cielo”, donde los fragmentos insinúan algún tipo de estructura, pasada, ahogada.
El intenso fluir que signa “Jeux d´eau” es tal vez el mismo que, inquietante en la obra de Maurice Ravel, hace que los timbres y notas se mezclen una y otra vez, en donde el cambio se presenta tan pregnante que parece ser siempre un mismo juego cambiante. Tal vez ése sea el patrón del agua, el juego del ciclo del agua, el natural juego de agua.
Damián Luciani
muestra “Jeux d´ eau”
Apertura 18 de julio a las 20 hs
Uriarte 1332 "Pabellón 4"
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
3 comments:
Damián: Miguel Ronsino me anunció tu próxima muestra en Pabellón 4. Y entro a tu blog. Te descubro y descubro tu arte. Y tu fascinación por el agua, asunto esencial en mi poética desde siempre. Espero podamos vernos personalmente alguna vez, por ahora va mi felicitación y mi abrazo.
A los ahogados nadie los recoge
y los sepulta, permanecen
flotando de espaldas, a flor de agua.
Se ahogan por amor,
por distracción, por angustia,
por fascinación por el abismo,
por cansancio. A su modo, continúan respirando;
persiguen, a su modo, la luz.
Cada noche, repiten, con su idioma
puro,
la lengua silenciosa y pura de los ahogados,
un mismo y único poema,
que los que aún no nos ahogamos
no sabemos y si lo supiéramos,
no entenderíamos.
Carlos Barbarito
Fuerza, movimiento, delicadeza y la luz dando forma a una materia tan cambiante como es el agua.
Tuve el privilegio de apreciar tu obra un "dia fuera del tiempo"... y estuvo rebueno.
Felicitaciones
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